2. Durante la entrevista de trabajo hay que demostrarle al reclutador
que la experiencia y el perfil ofrecen una oportunidad a la empresa.
3. El candidato que logré impactar ofreciendo una respuesta que, de
alguna manera, garantiza resultados sobre el perfil del puesto, tiene mayores
posibilidades. No se trata únicamente de decirlo, “de dientes para afuera”, en
la respuesta hay que mencionar los objetivos y cómo se van a lograr.
4. Destacar las habilidades paralelas, por ejemplo: cómo te puedes
desarrollar con el equipo de trabajo interno, con los clientes o con el
personal de empresa en la que estás concursando por el puesto.
5. Convencer al reclutador de que el desempeño laboral dará el
resultado que ellos requieren y más, no es sencillo. Es necesario mostrar
planeación y datos concretos.
6. Mencionar la experiencia, conocimientos y habilidades específicas,
enfocadas en las tareas y asignaciones del puesto solicitado.
7. Identifica cómo tus habilidades van a ayudar a la empresa a ser más
productiva. De nada sirve una presencia sino hay eficiencia.
8. Toma en cuenta el tiempo de la entrevista. Evita los “rollos
mareadores”, se directo en las respuestas. Considera la tolerancia del
reclutador que por lo general dedica entre 10 y 20 minutos a cada entrevista.
Una buena actitud calma la tensión durante la entrevista.
9. Evita hablar de lo que tú quieres, ofrece ideas concretas de lo que
puedes aportar a la organización.
10. Mantener sintonizado al entrevistador todo el tiempo, a manera de
ir identificando sus necesidades y por tanto modificando tu estrategia.
Recuerda, que una persona tiende a retener lo último que escucha. Asegura no
debilitarte al final de la entrevista
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