martes, 6 de marzo de 2012

Superando el duelo del desempleo.

Hoy en día todos, absolutamente todos nos enfrentamos al riesgo de perder la fuente de ingresos sin algún tipo de advertencia.




Lo más importante para emprender la búsqueda exitosa es superar el duelo, dejar de pensar si probablemente tienes o no responsabilidad sobre los hechos que han motivado tu despido.



En este momento carecen de importancia tus sensaciones y sentimientos sobre “lo que hiciste, lo que debías de hacer, o dejaste de hacer”. Mientras te centres únicamente en ello transmitirás tu resentimiento y darás una imagen de fracaso. A los optimistas se les reconoce e identifica inmediatamente. A los “fracasados” también. No es necesario, procedente y oportuno que actúes como un “mendigo”.



La diferencia entre el éxito y el fracaso en cualquier actividad humana, y también en la búsqueda de un empleo dependerá básicamente de ti mismo. Si planteas tu búsqueda pensando en que los demás deben resolver “tu  problema” estarás actuando como la mayoría de las personas que se encuentran en tu situación.



Tu búsqueda será más o menos larga en función del número de horas semanales que dediques a la misma. Debes comprometerte a dedicar como mínimo 20 horas. Las restantes las dedicarás una parte a ti mismo (deporte, formación, familia) la otra a hacer algún tipo de colaboración no remunerada. Existen multitud de organizaciones o fundaciones sin ánimo de lucro que necesitan de ti de tus competencias y tus capacidades.



Existen 13.000 capacidades humanas distintas y una persona normal sólo tiene 700. Siéntate, reflexiona y pienso en ello. Determina que es lo que le hace ser diferente de los competidores. Prepárate para enfatizar tus cualidades y para definir y comunicar qué puedes aportar.



Probablemente no encontrarás un empleo como el que perdiste en un entorno como el que has vivido en tu última etapa profesional. Persigue a las pequeñas y medianas empresas ya que es en ellas donde se crean el 80% de los nuevos puestos de trabajo. No descartes tampoco otro tipo de alternativas profesionales.



No te asustes ni te hundas por los rechazos. La búsqueda comporta escuchar muchas veces no. Piensa que cada vez que escuchas esta palabra te acercas más al sí.


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